
No lo pude evitar, volver a reírme de lo bien que me veo con este sombrero de lanchero acapulqueño y un vestido azul con cabellera rubia e intentando encontrar un cerebro con dibujos de los más bizarros y fotomontajes chafas, en el blog de mi amigo Milton, después de haberle herido sus sentimientos demostró todo su coraje en esas cuantas cosas que posteó hace unos días.