Ya nos cargaba el hambre a los dos, después de instalarnos en el hostal salimos a buscar la cena y esta hermosa texana estaba en la puerta del restaurante "La Botellita" fue la invitación para comer de lujo y así arranco la fiesta. Me encanto y su amabilidad con esa sonrisa de ángel. Yo no le quitaba la mirada de encima, me caí que es hermosa y súper agradable las cuatro veces que fui a comer allí me hizo el día y la tarde del mejor Cervantino que haya ido. ¡¡Ah!! y también la noche -jejeje- se hizo nuestra amiga de Nash y mía, pero a mi me derrite.
viernes, 19 de octubre de 2007
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario